Dodge Charger Sixpack 2026: el regreso a la gasolina
Dodge ha revelado la incorporación más reciente a la gama Charger: el Sixpack 2026, un modelo de combustión interna que marca el regreso de este muscle car a la gasolina tras el lanzamiento de las versiones eléctricas. Construido sobre la plataforma STLA Large de Stellantis, el nuevo Charger Sixpack combina diseño musculoso, tecnología avanzada y un tren motriz adaptado a las regulaciones actuales sin sacrificar desempeño.
La oferta mecánica incluye un motor Hurricane de seis cilindros en línea y 3.0 litros biturbo, disponible en dos configuraciones. El R/T entrega 420 caballos de fuerza y 468 lb-pie de torque, mientras que el Scat Pack alcanza 550 caballos y 531 lb-pie, con una aceleración estimada de 0 a 100 km/h en 3.9 segundos. Ambos incorporan transmisión automática de ocho velocidades, tracción total con posibilidad de desconexión del eje delantero y modos de manejo que van desde Eco hasta configuraciones de alto rendimiento.
En el exterior mantiene las proporciones anchas y el estilo agresivo característico del Charger, con parrilla de mayor apertura, protuberancia en el cofre y escapes dobles funcionales. El interior replica gran parte del equipamiento tecnológico visto en el Daytona eléctrico: pantalla central de 12.3 pulgadas, cuadro de instrumentos digital, sistema Uconnect 5 y conectividad inalámbrica. Su carrocería liftback mejora la practicidad, ofreciendo hasta 37.4 pies cúbicos de capacidad de carga con los asientos abatidos.
El Charger Sixpack R/T de dos puertas tendrá un precio inicial de 51,990 dólares, mientras que el Scat Pack partirá de 56,990 dólares. Las versiones sedán llegarán en la primera mitad de 2026 con un incremento aproximado de 2,000 dólares. Con esta propuesta, Dodge busca mantener la experiencia de conducción de alto desempeño en una era marcada por la electrificación, apostando por un seis cilindros que pisa fuerte en el segmento.
