GWM TANK 300: Tecnología y Seguridad
El GWM Tank 300 no solo destaca por su mecánica y capacidad fuera del asfalto; también integra un conjunto de tecnologías pensadas para facilitar la conducción y aumentar la seguridad en todo tipo de entornos.
En el puesto de mando, dos pantallas de 12.3 pulgadas marcan la diferencia. La primera, ubicada frente al conductor, funciona como cuadro de instrumentos digital con información clara y personalizable. La segunda, en el centro del tablero, gestiona el sistema de infoentretenimiento, compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Desde allí se controlan funciones como la cámara 360° y la innovadora visión de chasis transparente, que permite “ver” el terreno bajo el vehículo, una ayuda clave para maniobras fuera de carretera.
El apartado de confort no queda de lado: incorpora cargador inalámbrico, sistema de sonido premium Infinity by Harman con subwoofer integrado y luces ambientales de 64 colores, que permiten personalizar el ambiente interior. Los mandos físicos y digitales están bien distribuidos, de manera que la operación es sencilla incluso en movimiento.
En materia de seguridad activa, el Tank 300 cuenta con un paquete avanzado de asistencias al conductor. Entre ellas se incluyen frenado autónomo de emergencia con detección de peatones y ciclistas, control crucero adaptativo, asistente de mantenimiento y cambio de carril, alerta de tráfico cruzado trasero y monitoreo de punto ciego. También ofrece ayudas para la conducción en pendientes y control de descenso, útiles en rutas de montaña o caminos irregulares.
La integración de estas tecnologías no es solo un complemento, sino un elemento clave que amplía la versatilidad del vehículo. Combinadas con sus capacidades mecánicas, estas herramientas logran que el Tank 300 pueda desenvolverse con soltura tanto en la ciudad como en terrenos donde otros SUV, más centrados en la estética, no se atreven a llegar.
