Los patrones históricos de Porsche vuelven a producción
Porsche decidió volver a producir varios de sus patrones textiles más emblemáticos, utilizados durante décadas en modelos como el 356, el 911, el 928 y el 944. El objetivo es ofrecer materiales auténticos para quienes buscan restaurar sus vehículos con la mayor precisión posible, especialmente en casos donde las telas originales ya no existen o fueron sustituidas por imitaciones de menor calidad.
La iniciativa responde a una necesidad frecuente entre propietarios y restauradores: muchos autos han conservado la carrocería o la mecánica, pero no sus interiores. Sin materiales originales disponibles, el resultado suele ser un acabado poco fiel al diseño histórico. Para evitarlo, Porsche analizó muestras de archivo y adquirió piezas raras que permitieran reproducir los tejidos con exactitud.
Una reedición basada en investigación
Los nuevos cortes de tela se desarrollaron a partir de documentos, muestras antiguas y hallazgos excepcionales, como un asiento de 911 de 1975 tapizado en tartán verde que permaneció almacenado durante décadas sin usarse. Este tipo de piezas sirvió como referencia para recuperar colores, tramas y texturas idénticas a las de época.
Aunque el diseño se mantiene fiel al original, los materiales actuales fueron sometidos a pruebas de resistencia al fuego, desgaste y solidez del color. Esto asegura que puedan instalarse sin generar contrastes visibles en vehículos que aún conservan parte de su tapicería de fábrica. Los cortes se ofrecen en medidas de 1.5 por 2 metros y están disponibles en los Porsche Centers y en la tienda en línea de la marca.
Patrón por patrón: el regreso de iconos interiores
Entre los tejidos que vuelven a producción se encuentran varias versiones de Pepita, diseño geométrico que apareció en los años sesenta; combinaciones clásicas de tartán como McLaughlan y Black Watch, populares en la década de 1970; así como Pasha, un patrón de rectángulos que debutó en el Porsche 928 y que se volvió uno de los interiores más característicos de su época.
También regresan las telas con la palabra “Porsche” repetida en distintos tonos, además de terciopelos de rayas finas y variantes multicolor utilizadas en modelos producidos entre finales de los setenta y principios de los noventa. Cada tela conserva su número de parte correspondiente y su vínculo con los modelos para los que fue diseñada originalmente.
Disponibilidad y ampliaciones próximas
Esta reedición cubre una parte importante del archivo textil de la marca, pero no es el cierre del proyecto. Porsche adelantó que trabaja en más variantes históricas, entre ellas las rayas finas en el tono naranja “lobster”, que fueron características de algunos interiores de décadas anteriores.
