Elon Musk denuncia ciberataque tras caída de X
Este lunes, la red social X, anteriormente conocida como Twitter, sufrió una interrupción significativa en su servicio, afectando a miles de usuarios en diferentes regiones. Según Elon Musk, propietario de la plataforma, la causa de esta caída estaría relacionada con un «ciberataque masivo» que habría requerido una gran cantidad de recursos, lo que sugiere la posible participación de una organización coordinada o incluso de un gobierno.
A través de una publicación en X, Musk aseguró que la plataforma recibe ataques con frecuencia, pero en esta ocasión la ofensiva superó cualquier otra registrada previamente. Cuando un usuario insinuó que se trataba de un intento de censura contra la red social y su dueño, Musk respondió de manera breve: «sí».
Un entorno de tensión en las empresas de Musk
El supuesto ataque a X se produce en un contexto en el que Musk enfrenta dificultades en varias de sus compañías. Tesla ha registrado una baja en sus ventas dentro del mercado europeo, mientras que en Estados Unidos algunos de sus concesionarios y vehículos han sido objeto de ataques. En publicaciones recientes, el empresario señaló que estos incidentes podrían estar relacionados con sectores progresistas y figuras de alto perfil que, según él, buscan perjudicar su negocio.
Otro foco de tensión involucra a Starlink, su empresa de internet satelital, cuyo papel en la guerra de Ucrania ha generado controversia. Recientemente, Musk sostuvo un enfrentamiento público con un ministro polaco en relación con el uso de la tecnología de Starlink en el conflicto, lo que incrementó el debate sobre la influencia de la compañía en asuntos internacionales.
¿Ciberataque o falla técnica?
Desde que Musk adquirió Twitter en 2022 y lo convirtió en X, la plataforma ha operado con una plantilla reducida, lo que generó especulaciones sobre posibles problemas en su infraestructura. Aunque la red social ha mantenido estabilidad durante este tiempo, la caída de este lunes ha reavivado las dudas sobre su capacidad para sostenerse con menos personal.
Musk, sin embargo, ha descartado cualquier relación entre la interrupción del servicio y los cambios en la estructura de la empresa, insistiendo en que se trató de un ataque externo. Hasta el momento, no ha proporcionado pruebas concretas sobre los responsables ni el alcance real del incidente, lo que ha dejado abierta la posibilidad de que el origen del problema sea otro.
El suceso pone en evidencia la vulnerabilidad de las grandes plataformas digitales y deja abierta la discusión sobre la seguridad y estabilidad de X en el futuro.
