Spread the love

Tu primera aventura

Por: Felipe Clavel 

Fotos: Kris Kuri 

Detalles que enamoran 

El tablero de instrumentos nos presenta un velocímetro analógico, pero con información digital. Muy bien logrado, con ese estilo retro que se ve en toda la moto. 

Algo que siempre me ha gustado de Triumph es lo bonitos que son todos sus modelos, creo que no hay uno solo que no me guste. 

Triumph se caracteriza por agregar detalles de diseño que son únicos y elegantes en cada producto. Sin duda, donde más podemos ver esto es en la línea que la marca denomina: “Modern Classics”, dentro de la cual podemos encontrar las gamas: Speed, Scrambler, Bonneville y Thruxton, con motores bicilíndricos paralelos de 900 y 1200 CC, que nos traen líneas retro con mucha tecnología.  

Si lo comparamos con coches, sería como querer comprar un Ford Mustang modelo ’65 pero con toda la tecnología actual, y cero kilómetros. 

Actualmente, Triumph ha abierto esta línea de productos para los amantes del diseño clásico que quieren empezar en este mundo, por eso el lanzamiento de la nueva Triumph Scrambler 400X. 

Atención a los detalles 

Como mencionaba al inicio, una de las grandes características de la marca son los detalles. Me pasa que, sobre todo con la línea Modern Classic, podría comprar una de estas motos solo para dejarla de adorno en la sala de mi casa y pasar horas mirándola.  

Otro detalle que me llama la atención son los tornillos… ¡sí, los tornillos! Incluso los que sujetan el soporte del pasajero en el asiento trasero tienen cierto nivel de diseño. 

Podemos ver el logo triangular característico de Triumph en el faro principal, el foco trasero, el tanque y el motor, al menos los que yo pude distinguir, porque no me sorprendería que estuviera en otros lugares. Pero cuando hablamos de diseño, no significa que cuantos más lugares aparezca el logo, mejor sea, sino en cómo nos pueden traer ese estilo clásico. 

Por ejemplo, en toda la línea Modern Classic, y claramente en la nueva 400X, podemos apreciar como existe una forma de «simular» el carburador que traían esas motocicletas clásicas de los años 50. Triumph logra traernos esa nostalgia con un simple cromo detrás del motor que asemeja ese elemento, ahora reemplazado por el sistema de inyección electrónica. 

No puedo dejar pasar lo lindo que es el faro principal. Es completamente LED, cubierto por una malla protectora de plástico con una línea de luz que nos recuerda la firma de Triumph. Este elemento representa ese “choque” generacional, un faro redondo clásico, pero con tecnología contemporánea y ese diseño elegante que ofrece la marca. 

Performance 

Cuando hablamos de motos del tipo “Scrambler”, nos remontamos a los años 50 y 60, una época en que las motos eran “de un solo tipo”, para moverse del punto A al punto B. Todas debían rendir bien en distintos terrenos. Así, cuando buscaron especializar un poco más estas motos para la tierra, empezaron a cambiar las llantas por unas con tacos, instalar manillares más altos, cortar los asientos para aligerarlas, y extender los apoya pies  

para mayor estabilidad, entre otros ajustes. De ahí nació el concepto scram, en español trepar. Por eso, muchas marcas usan este concepto cuando hablamos de motos clásicas con algunos atributos para el off-road. Pero, ¿es realmente la 400X una moto con ADN Scrambler? Si revisamos la descripción anterior y la aplicamos a la Triumph Scrambler 400X, definitivamente lo es. 

Tiene un manillar tipo «Motocross», alto, con una barra anti vibración cubierta con un protector de espuma. Los estribos son anchos y la suspensión delantera y trasera tiene un recorrido de 150 mm. Además, posee un motor mono cilíndrico de 398 cc con 40 hp, que entrega un torque considerable en el primer rango de RPM (50 Nm a las 6,500 rpm).  

Viene equipada con las llantas Metzeler Karoo Street, que personalmente he probado en otras motos y funcionan muy bien tanto en tierra como en asfalto. 

Tuve la oportunidad de probarla en un corto trayecto de off-road, y se comporta de manera suficiente. El recorrido de suspensión no es tan largo como para caminos más técnicos, pero sí responde bien en terrenos destapados. 

En carretera 

Cuando hablamos de su uso en carretera, es cuando empezamos a desear «un poco más». Al ser un diseño clásico, no cuenta con elementos modernos como un carenado para protegernos del viento. La protección aerodinámica es nula, a velocidades superiores a 100 km/h, se empieza a extrañar un parabrisas, asimismo, el motor de 40 hp se ve afectado por la resistencia al viento y la moto comienza a sentirse exigida. Mi recomendación es que, si deseas viajar con esta moto, le instales un parabrisas pequeño (para no afectar su espectacular diseño), o la utilices a velocidades crucero de no más de 100 km/h. 

En ciudad 

Donde esta moto realmente brilla es en la ciudad. A pesar de estar diseñada para el off-road, estos atributos ayudan mucho en entornos urbanos. La llanta delantera de 19 pulgadas con rines de acero, sumada a su manillar de “motocross”, le otorgan una movilidad increíble, por lo que pasar entre automóviles nunca fue tan fácil. Además, debemos sumar que esta moto, con el tanque lleno, pesa solo 179 kg. 

Ten en cuenta que la altura del asiento al suelo es de 835 mm, así que no es una moto pequeña. Yo mido 1.80 m, y llego con las plantas de los pies bien al suelo, ayudado también por el tanque delgado, que minimiza la sensación de altura. 

Conclusiones 

La Triumph Scrambler 400X está pensada para aquellos que desean entrar al mundo de las motos y, sobre todo, en la línea de productos Triumph con ese espectacular diseño clásico.  

Dentro de este segmento, en el mercado es difícil o imposible encontrar un producto que ofrezca tanto diseño y calidad a ese precio (Precio base 139.990 MXN).  

Esta moto es ideal para ti, si quieres andar por la ciudad con tu chamarra de cuero, tu casco retro con gafas, sobre una moto que robe miradas. 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *