Rolls-Royce acompaña los desfiles de París

Durante la Semana de la Moda Masculina Primavera-Verano 2026 en París, una de las citas culturales más influyentes del año, Rolls-Royce Motor Cars estuvo presente de forma sutil pero significativa. Sin anunciarse como protagonista, la marca británica acompañó los momentos clave del evento al convertirse en el transporte elegido por diseñadores, invitados y figuras del mundo de la moda.
A lo largo de la semana, los modelos Spectre —el primer eléctrico de la firma— y Cullinan recorrieron distintos puntos de la ciudad, trasladando a los asistentes entre desfiles, recepciones y encuentros privados. Su presencia, más que funcional, operó como parte del mismo lenguaje estético que define a este tipo de celebraciones.

Este tipo de integración no es nueva para la marca. Rolls-Royce ha cultivado desde hace años una relación con el universo de la moda y el diseño a través de colaboraciones con casas reconocidas, propuestas inspiradas en colecciones textiles y acabados desarrollados bajo técnicas propias de la alta costura. Algunos ejemplos incluyen el Cullinan – Inspired by Fashion, el exclusivo Phantom Oribe, y encargos como el Phantom Syntopia, donde materiales y bordados fueron seleccionados con criterios similares a los de un atelier.
Phil Fabre de la Grange, responsable del área de personalización de Rolls-Royce, destacó el valor simbólico de esta coincidencia: “París siempre ha representado una fuente de inspiración. Su arquitectura, su historia y su estética dialogan directamente con la forma en que concebimos el diseño. Participar en la Semana de la Moda no es solo acompañar, es compartir una sensibilidad común”.

Sin necesidad de destacar con estridencia, los vehículos de la marca se integraron al paisaje cultural del evento. En un entorno donde cada detalle comunica identidad, Rolls-Royce reafirmó que también en el ámbito del lujo automotriz existe espacio para la creatividad, la expresión personal y la conexión con el arte contemporáneo.